domingo, junio 10

El ladrón de cuerpos


Después de muchos días de trabajo, y también habiendo terminado las crónicas de Dragonlance, me enfrasque en la lectura de esta, la cuarta novela de vampiros de Anne Rice, la cual retoma un estilo de novela de detectives y donde la aventura se entreteje con los pensamientos profundos y oscuros de nuestro personaje favorito.


Esta vez, Lestat a vuelto a quedar solo - dada su naturaleza de depredador - y comienza a añorar nuevamente la compañía de otro ser como él. Es así que se acerca, nada menos que al director de la Talamasca, creando una amistad que se estrecha con el correr de la novela y que traerá serias consecuencia a la vida de nuestro inmortal amigo.

En medio de estas cavilaciones, nuestro vampiro es interceptado por un personaje que le ofrece algo que ha estado buscando por largo tiempo; volver a descubrir su propia mortalidad a través de otro cuerpo. Este "brujo" por decirlo por algún modo, le ofrece un cambio de cuerpos, un cuerpo que a los ojos de Lestad tiene todo lo que quiere. Por otro lado Lestad ya ha descubierto que con los poderes acumulados, su muerte ya es imposible y que la luz del sol no tiene tanto efecto en él.

El cambio se realiza pero las cosas no salen como el vampiro esperaba, por lo que se va quedando poco a poco sin mas salida que recurrir a su nuevo pero mas entrañable amigo David Talbot. La novela nos lleva de un lugar a otro mientras Lestad y David intentan dar caza al nuevo vampiro y quitarle el cuerpo usurpado. Mientras Lestad cada vez desencanta mas de la vida como mortal.

Una gran novela, con un final mas que complicado pero muy bien logrado. Una especial recomendación a los hijos de la noche que siguen paso a paso las aventuras de este personaje, su vampiro favorito.