Despertando la imaginación... natural

El día de ayer, en la muy amena reunión por el aniversario de la lista Tolkien, el pasaje que leí, me trajo muchos recuerdos de la primera vez que tuve que escribir una historia, o un cuento, se puede decir.
El profesor nos relata el momento que Tuor llega ante la última de las puertas antes de entrar al valle de Tumladen donde se encuentra la roca escondida, Gondolin la de los blancos muros. Pero luego de revelar su identidad, el mensajero de Ulmo, se queda mudo, al igual que el escritor, privándonos de mayores revelaciones poéticas sobre la bella ciudad de Gondolin.

Para los que me conocen poco y no tiene la menor idea de lo que estoy hablando, pues solo deben echarle una ojeada la imagen de portada del blog... si, esa es Gondolin la bella.

Bueno, bueno, a lo que iba; regrese tarde a mi casa luego de cumplir con algunos de mis deberes, pero mas que nada una despedida muy, pero muy triste; no es momento aun de contar los pormenores. Como decía, en la noche estaba viendo el programa, el francotirador, que entrevistaba al popular Caradehaba.

Una de las preguntas, hacia referencia si había consumido drogas durante la universidad, y Romero le contesto que había sido una etapa; pero que no había traído consigo mayores pormenores. Es decir, los acontecimientos no se ataron a este estimulante.

Me puse a reflexionar sobre el particular, y la verdad - no se el casi particular de cada uno de ustedes - es que para mi tampoco significo nada del otro mundo. Muchos me han dado las mas extensas explicaciones sobre el caso pero la verdad; sigo creyendo que el haber despertado mi muy amplia, complicada y exótica imaginación desde chico, me permitió pasar por alto algo que no hubiera dado mayor vuelo a lo que tengo.

Que yo recuerde, siempre he soñado, dibujado y escrito sobre cosas fantásticas sin mas necesidad que el solo aliciente de las innumerables historias que alimentaron mi cabeza desde pequeño. Tengo como grandes maestros, a parte del Profesor, a Asimov, Herbert, Verne, Dumas, Tolstoi, Salgari, Poe, Doyle, London, Kafka... y muchos mas.

Mañana sentado en la butaca del cine, a partir de medianoche, podré disfrutar de una fantasía mas, que será agregada a mis ideas. Y todo fruto de una buena escritora, que también debe sus ideas a su gran imaginación y - estoy seguro - los acontecimientos que le ocurren día a día. Comiencen a imaginar, y llegaran más lejos que nadie.